999:9999 (Peter Manus) / 2002: Chulachak Chakrabongse, Paula Taylor, Sririta Jensen, Thepparit Raiwin, Norajan Sangigern, Titinun Keatanakon, Ramit Romon, Pisut Praesangeam, Janeen Lyons, Chatthapong Pantanaunkul.

   Nos encontramos ante una película tailandesa que copia descaradamente a los modelos americanos, inspirándose impúdicamente en películas como Wishmaster, Robert Kurtzman, 1997 (alguien concede deseos a los protagonistas a cambio de sus vidas, aunque, obviamente, ellos ignoran esta última cláusula del trato) y Destino final, James Wong, 2000 y sus secuelas (algo indefinido persigue a los chicos, a los que liquidará de las maneras más variadas y rebuscadas, tal y como hacía la muerte en la saga mencionada).

   De todas formas, las muertes están mucho menos inspiradas que en la tetralogía mencionada, habiendo algunas destacables y sangrientas, como la del chico gordo cuyo intestino se queda enganchado en una ventana, de la que cae, quedando las vísceras colgando del marco de la misma, y otras rematadamente torpes, como la de la chica en la habitación sin gravedad, desmembrada (digitalmente) por unas cuchillas (digitales). Si no tienes dinero para efectos por ordenador, usa el ingenio, pero no quedes en ridículo. Además se hace demasiado larga (103 eternos minutos) y el presunto final sorpresa es absolutamente predecible (el juego cansino de hacer que uno de los protagonistas sea el instigador de todo lo acontecido, buscando el más difícil todavía, comienza a resultar ya ciertamente pesado, y más si como en este caso, las razones que se dan son del todo absurdas).

(3/5)

CARÁTULAS Y POSTERS

TRAILER USA 1

TRAILER USA 2

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