AMMON EL DESTRUCTOR (Kevin VanHook) / 2005: Casper Van Dien, Kristen Miller, Geoffrey Lewis, Navid Negahban, Scott Whyte, Tom Bosley, Robert Wagner, Saginaw Grant, Irwin Keyes, Carol Struycken, Robert Allen Mukes.

   Matt Fletcher (un Van Dien que llegó a la cumbre con Starship troopers: Las brigadas del espacio, Paul Verhoeven, 1997, y que actualmente se ve defenestrado a infectos subproductos destinados a las más recónditas estanterías de los videoclubs o a los canales de cable más inhóspitos) es un arqueólogo que se encuentra accidentalmente (el suelo por el que camina se hunde y cae a una cueva) la momia de un ser gigantesco que en la antigüedad fue enviado a la tierra para destruirla. Ante las desapariciones de varios miembros de la excavación, se produce la llegada de un hombre para su protección, que resulta ser Ammon, el ángel caído, padre del gigante que regresa a nuestro planeta para cumplir cierta profecía que le permita dominarlo a su antojo.

   Ante semejante argumento (¿Una momia gigante que vuelve a la vida para ayudar a su progenitor a conquistar el mundo?), poco más cabe decir. Aunque si a ello añadimos la mediocrísima dirección de un VanHook cuya filmografía da más miedo que la película (unos cuantos telefilmes y varios productos dirigidos al mercado del DVD totalmente desconocidos son su mínimo bagaje); unos efectos especiales tan cutres y lamentables que parecen hechos en el patio de atrás de la casa del director (ojo a los trucos para simular el gigantismo de los seres, a alguno de los efectos infográficos, y a las maquetas que se emplean en algunas de las escenas -ese helicóptero de juguete que es capturado por uno de los colosos y lanzado por los aires-); y unos actores que debían de tener demasiadas facturas pendientes en el momento en el que firmaron su contrato, y entre los que encontramos a gente que conoció tiempos mejores (como Lewis o Wagner), podemos llegar a la conclusión de que nos hallamos ante un filme tan mediocre e insulso que no posee ni un solo momento mínimamente destacable.

  Cabe citar el dato de que tanto Keyes como Allen Mukes, que en este filme tienen papeles muy secundarios, dieron vida a dos de los miembros de la familia Firefly en La casa de los mil cadáveres, Rob Zombie, 2003.

(2,5/1)